Exploration Weekly - Sirius XM se enfrenta a una demanda / Nueva organización para desarrollar normas de IA en la industria musical / Compositores emprenden acciones legales contra PRS For Music

La transmisión digital no interactiva de música se diferencia de la transmisión digital bajo demanda, o interactiva, porque permite a los usuarios reproducir música pero no les permite seleccionar la siguiente canción. Las transmisiones digitales no interactivas generan una regalía por la grabación sonora y la composición de la canción.

La regalía de ejecución asociada a la grabación sonora de la canción se paga a SoundExchange, mientras que la regalía de ejecución asociada a la composición de la canción se paga a las Sociedades de Derechos de Ejecución Pública (Performing Rights Organizations o PRO, por sus siglas en inglés).

Aunque pueda parecer que la transmisión digital interactiva es la única forma de consumo de música hoy en día, las investigaciones y los datos muestran que la transmisión digital no interactiva sigue siendo muy relevante.

Dada la popularidad de esta forma de consumo de música, su rápido crecimiento desde principios del siglo XXI, y su enorme potencial para proporcionar nuevas y actuales fuentes de regalías, cualquier interesado debería tratar de entender los detalles de la transmisión digital de música no interactiva y sus efectos para el futuro de la industria musical.

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En este boletín:

• Sirius XM se enfrenta a una demanda por el recargo de " regalías musicales en EE.UU." que añade un 21% al costo mensual de la suscripción
• ¿Qué está bien en el mundo de la IA musical? Nueva organización elaborará normas para el sector
• Compositores toman medidas legales contra PRS For Music por la concesión directa de licencias por regalías de conciertos
• Principales disqueras demandan a los generadores de música por IA Suno y Udio por "infracción masiva" de los derechos de autor

Sirius XM se enfrenta a una demanda colectiva en el estado de Washington por su tarifa por "regalías musicales en EE.UU.", que añade un 21,4% al costo de suscripción anunciado para cubrir las regalías musicales.

Un grupo de profesionales de la industria musical será convocado por una nueva organización llamada AI:OK con el objetivo de acordar normas industriales globales para el uso de la música en la IA, y de la IA en la música. Su fundador, Martin Clancy, afirma que "nos dedicamos a garantizar que la IA se utilice de forma ética".

Un grupo de cantautores y compositores del Reino Unido ha presentado una demanda contra PRS For Music, su organización de gestión colectiva. Su objetivo es reformar las políticas que consideran perjudiciales para sus intereses y los de los miembros de PRS en general.

Ahora, los detalles...

28 de junio, 2024
Recopilado y traducido por Ana Berberana

Sirius XM se enfrenta a una demanda por el recargo de " regalías musicales en EE.UU." que añade un 21% al costo mensual de la suscripción

Sirius XM ha sido demandada por su tarifa "regalías musicales en EE.UU", un recargo añadido al costo de suscripción anunciado para cubrir lo que la empresa de radio por satélite debe a la industria musical. La tasa incrementa en un 21,4% el precio de cualquier abono a la radio por satélite Sirius con acceso a música en Estados Unidos. La demanda colectiva presentada en el estado de Washington afirma que cualquier "consumidor razonable" esperaría que el precio anunciado del servicio incluyera cualquier "coste fundamental" asociado al acceso a contenidos musicales. Ningún otro servicio de música, insiste, cobra una tarifa de regalías separada "por encima de los precios de sus planes de música anunciados." "Esta acción cuestiona un esquema de precios engañoso por el que Sirius XM anuncia falsamente sus planes de música a precios más bajos de los que realmente cobra", reza la demanda. "Sirius XM no incluye en sus precios anunciados el importe de su inventada 'Tasa por regalías de música en EE.UU.', que aumenta el precio real del plan en un 21,4% por encima del precio anunciado de los planes". La demanda afirma que Sirius anuncia sus planes de suscripción a la radio por satélite antes de aplicar la tasa del 21,4%, junto a la frase "más tasas e impuestos", normalmente en un tipo de letra más pequeño. Alrededor de 33,9 millones de abonados se ven afectados por esta tasa adicional, que, según la demanda, genera ingresos masivos; en 2023, el total de las tasas por regalías musicales recaudadas por la empresa superó los 1.360 millones de dólares, más que todo el beneficio neto de la empresa, que fue de 1.260 millones de dólares. En Estados Unidos, es habitual que los impuestos sobre las ventas no se incluyan en el precio anunciado de un servicio porque los impuestos varían según el estado. Pero la demanda afirma que las tasas adicionales que cobra Sirius son casi en su totalidad el canon por derechos de autor de la música, especialmente en estados como Oregón, que no tienen impuestos sobre las ventas. Los suscriptores que están detrás de la demanda subrayan que no se oponen a que los creativos, sellos discográficos y editores cobren cuando se reproduce música en los servicios de Sirius, pero pagar por la música cuando se gestiona un servicio de streaming musical es un gasto empresarial básico y no debería presentarse como una "tasa añadida" a los suscriptores.

¿Qué está bien en el mundo de la IA musical? Nueva organización elaborará normas para el sector

Una nueva organización llamada AI:OK se ha puesto en marcha oficialmente con el objetivo de desarrollar normas globales para la industria y un sistema de certificación que permita "identificar fácilmente la música producida éticamente en la era de la inteligencia artificial". Con sede en la Universidad de Dublín y el apoyo del gobierno irlandés, AI:OK formará un consejo asesor de profesionales de la industria musical para debatir y determinar "qué está bien" en lo que respecta al desarrollo y uso de la IA en la música. "Queremos asegurarnos de que la IA se utiliza de forma ética y de que creadores y consumidores comparten la misma confianza en la música que escuchamos y creamos juntos", afirma Martin Clancy, fundador del nuevo proyecto. "La IA sigue evolucionando a un ritmo vertiginoso, por lo que consideramos necesario que la industria de la música diera este paso tan necesario". Existe un consenso general en la comunidad musical sobre las obligaciones legales y éticas de las empresas tecnológicas que utilizan música existente para desarrollar modelos generativos de IA. Es decir, que deben pedir permiso a la industria musical. Muchas empresas de IA no están de acuerdo en este punto, aunque algunas intentan colaborar con la industria a medida que desarrollan sus tecnologías. El objetivo de programas como AI:OK es reconocer y defender este enfoque. La ambición es que los músicos, creadores y aficionados a la música se vean influidos por una marca AI:OK a la hora de elegir herramientas de IA y música generada por IA. Sin embargo, existe desacuerdo en la comunidad musical sobre hasta qué punto las discográficas y los editores de música pueden conceder licencias de grabaciones y canciones de su propiedad a empresas de IA sin el consentimiento específico de artistas y compositores. Como resultado, hay desacuerdo en la industria sobre lo que es "aceptable", lo que significa que las plataformas de IA consideradas "aceptables" por los sellos discográficos y los editores pueden no contar con la aprobación de los artistas y compositores. Queda por ver si el consejo asesor de AI:OK puede llegar a algún tipo de consenso para que todas las plataformas de IA que el sistema apruebe sean definitivamente "aceptables" para toda la comunidad musical.

Compositores toman medidas legales contra PRS For Music por la concesión directa de licencias por regalías de conciertos

Un grupo de cantautores y compositores del Reino Unido, entre los que se encuentra Robert Fripp, ha iniciado una acción judicial contra PRS For Music, su propia organización de gestión colectiva. La acción tiene por objeto revisar la aplicación de los procedimientos y políticas que, según el grupo, perjudican sus intereses y los de los miembros de PRS en general. Se ha unido a ellos en esta acción PACE Rights Management, una operación global que cubre la concesión directa de licencias de derechos de ejecución pública en directo (el derecho a ejecutar públicamente la música y/o la letra de un compositor mediante una actuación en directo). Según un comunicado, las cuestiones centrales de la acción legal son: El derecho de los compositores y editores de música a licenciar directamente sus derechos de ejecución pública en directo, sin tener que pasar por la PRS. La concesión directa de licencias permitiría a los compositores y editores beneficiarse de menos deducciones de sus ingresos por regalías, pagos de regalías más rápidos y una mayor transparencia en todo el proceso, según el grupo de compositores. Además, afirman que PRS está ocultando deliberadamente información a sus miembros sobre las deducciones de sus ingresos por regalías cuando sus derechos se licencian internacionalmente a través de PRS. Los autores que están detrás de la acción también afirman que la aplicación del Major Live Concert Service (MLCS), que concede condiciones preferentes a determinados titulares de derechos, entra en conflicto directo con las obligaciones de PRS como organización de gestión colectiva. En una declaración colectiva, los demandantes en la acción legal dijeron: "Desde una perspectiva teórica o académica, las eficiencias de la gestión colectiva de derechos tienen mucho sentido para los autores de canciones y compositores. Sin embargo, PRS se ha desviado significativamente de los principios sobre los que se fundó hace 110 años, hasta el punto de que las políticas de la organización ya no parecen funcionar en el mejor interés de sus miembros. Los miembros de PRS son tratados como ciudadanos de segunda clase en su propia organización.

Principales disqueras demandan a los generadores de música por IA Suno y Udio por "infracción masiva" de los derechos de autor

Entre los generadores de música por IA capaces de crear canciones enteras con sólo una indicación, Suno y Udio están considerados por muchos como de los mejores. También son muchos los que consideran que han utilizado música protegida por derechos de autor para entrenar sus modelos de IA, sin autorización. Ahora, la Recording Industry Association of America (RIAA) está coordinando demandas en nombre de las principales discográficas contra las dos empresas de IA. La demanda contra Suno se presentó en el Tribunal de Distrito de EE.UU. para el Distrito de Massachusetts, mientras que la demanda contra Udio se presentó en el Tribunal de Distrito de EE.UU. para el Distrito Sur de Nueva York, por lo que la RIAA llama "infracción masiva de grabaciones sonoras protegidas por derechos de autor copiadas y explotadas sin permiso por dos servicios de generación de música multimillonarios." "Las empresas de IA, como todas las demás empresas, deben acatar las leyes que protegen la creatividad y el ingenio humanos", afirman las denuncias contra Suno y Udio. "No hay nada que exima a la tecnología de IA de la ley de derechos de autor o que excuse a las empresas de IA de cumplir las reglas". Es probable que esa afirmación sea el punto clave de discordia en las demandas. Los tribunales estadounidenses aún no han dictaminado que el uso de materiales protegidos por derechos de autor para entrenar la IA constituya una infracción de los derechos de autor.